INCREMENTO DE LA TEMPERATURA

La temperatura media mundial se ha elevado medio grado centígrado desde el principio de este siglo.
A mediados del siglo que viene, la cantidad de dióxido de carbono de la atmósfera puede duplicarse y las temperaturas de la superficie del planeta pueden llegar a elevarse entre 3 y 5,5 grados centígrados.
Esto podría cambiar la distribución mundial de las precipitaciones, extender los desiertos del planeta y reducir drásticamente la producción agrícola.
Cualquiera de estos hechos o todos a la vez, serían desastrosos. El efecto invernadero refuerza el ciclo hidrológico; mas calor significa que más agua se evapora de ríos, lagunas y mares, lo que a su vez supone lluvias más torrenciales, huracanes y tormentas más fuertes, y un cambio en el equilibrio existente en las corrientes de aire entre tierra firme y superficies acuáticas. Derretimiento de los polos y glaciaciones. Tal vez la más grave de las secuelas de un calentamiento global podría muy bien ser la fundición de los casquetes polares.
Los científicos, sin embargo, siguen debatiendo sobre si llegará a ocurrir o no a pesar de que se ha calculado que en el siglo pasado "la expansión térmica ha elevado el nivel del mar unos cinco centímetros".